¿QUIÉN PODRÁ DEFENDERNOS?
El número de pandillas crece y crece en el Rímac.
Rímac, distrito colonial y poseedor de incuantificable patrimonio cultural del Perú y del Mundo, es un sitio cada vez más y más inseguro. Jóvenes entre los 9 y 23 años, hacen de las calles su campo de batalla, asaltando a cuanto transeúnte cruce por su ¨territorio¨ aprovechándose de su superioridad numérica, e inclusive portando armas de fuego o ¨fierros¨ como suelen llamarlas.
El Rímac está dentro de los diez distritos limeños con mayor magnitud de pandillaje juvenil, numerando 52 pandillas en su haber junto con las 'barras bravas' del Sporting Cristal, y el Holocausto (Universitario de deportes).
Según estudios la mayor parte de estas pandillas está vinculada a las "barras bravas" y se localiza en Flor de Amancaes, Los Ángeles, Chachi Dibós, entre otras zonas altas del distrito, desde donde bajan a las urbanizaciones y ponen en riesgo la seguridad de los vecinos.
Increíblemente muchas pandillas están formadas por mujeres, así es como por cada tres pandilleros masculinos existe un pandillero femenino, encargado del camuflaje de droga y/o de las armas, en las escasas redadas de la policía.
Sin embargo el actual burgomaestre, Ing. Víctor Leyton señalo que proyecta multiplicar el trabajo de patrullaje y vigilancia con la llegada de más de 20 vehículos policiales que se sumarán a las cuatro unidades de serenazgo existentes, dos motos y diez bicicletas con las que ahora prestan servicio. Y aunque no es la única medida existente suena insuficiente para alrededor de 300 000 habitantes.
Leyton afirmó que otra viga maestra de la nueva estrategia para enfrentar a las pandillas es la ejecución de un programa de atención a la juventud orientado a brindar oportunidades mediante talleres de liderazgo, capacitación en oficios y carreras técnicas, talleres de teatro y formación en valores. “Queremos llegar a la mayor cantidad posible de jóvenes y enfocamos nuestros esfuerzos en aquellos que han equivocado el camino y se agrupan en pandillas. Queremos convencerlos de que hay otras oportunidades en la vida.” Señaló.
Así es como Decenas de adolescentes de riesgo pertenecientes a las barras bravas y pandillas juveniles del Rímac, están recibiendo cada semana clases de baile de la Capoeira. Son alrededor de 20 jóvenes pertenecientes a las barras bravas de Sporting Cristal y pandillas nocturnas, que asisten cada lunes a recibir enseñanzas de flexibilidad, dominio de equilibrio y agilidad. Las clases se imparten cada lunes de 8 a 10 de la noche, a cargo de profesores especialistas, nutricionistas y sicólogas.
DATO:
Juventudes:
Es un programa de la municipalidad del Rímac en favor de los jóvenes, uno de los programas más efectivos a nivel municipal que ayudan a la reinserción de decenas de jóvenes. Antonio Cocha, jefe del área, afirma que la captación se hace a través del deporte, el baile y el cine que se ofrecen gratuitamente en el distrito.
"La barra no es el problema, porque ahí los chicos expresan su amor por el deporte, lo malo es la violencia que surge en los enfrentamientos entre barrios o equipos, y eso es lo que se destaca y se muestra con imágenes o charlas a los muchachos del Rímac", agregó Cocha.
Según el funcionario, resulta más complicado convencer a las mujeres pandilleras de que entren al programa, porque usualmente su familia no sabe de su participación en las pandillas. Sin embargo, acá se guarda total discreción y se les ayuda de esa manera.
Rímac, distrito colonial y poseedor de incuantificable patrimonio cultural del Perú y del Mundo, es un sitio cada vez más y más inseguro. Jóvenes entre los 9 y 23 años, hacen de las calles su campo de batalla, asaltando a cuanto transeúnte cruce por su ¨territorio¨ aprovechándose de su superioridad numérica, e inclusive portando armas de fuego o ¨fierros¨ como suelen llamarlas.
El Rímac está dentro de los diez distritos limeños con mayor magnitud de pandillaje juvenil, numerando 52 pandillas en su haber junto con las 'barras bravas' del Sporting Cristal, y el Holocausto (Universitario de deportes).
Según estudios la mayor parte de estas pandillas está vinculada a las "barras bravas" y se localiza en Flor de Amancaes, Los Ángeles, Chachi Dibós, entre otras zonas altas del distrito, desde donde bajan a las urbanizaciones y ponen en riesgo la seguridad de los vecinos.
Increíblemente muchas pandillas están formadas por mujeres, así es como por cada tres pandilleros masculinos existe un pandillero femenino, encargado del camuflaje de droga y/o de las armas, en las escasas redadas de la policía.
Sin embargo el actual burgomaestre, Ing. Víctor Leyton señalo que proyecta multiplicar el trabajo de patrullaje y vigilancia con la llegada de más de 20 vehículos policiales que se sumarán a las cuatro unidades de serenazgo existentes, dos motos y diez bicicletas con las que ahora prestan servicio. Y aunque no es la única medida existente suena insuficiente para alrededor de 300 000 habitantes.
Leyton afirmó que otra viga maestra de la nueva estrategia para enfrentar a las pandillas es la ejecución de un programa de atención a la juventud orientado a brindar oportunidades mediante talleres de liderazgo, capacitación en oficios y carreras técnicas, talleres de teatro y formación en valores. “Queremos llegar a la mayor cantidad posible de jóvenes y enfocamos nuestros esfuerzos en aquellos que han equivocado el camino y se agrupan en pandillas. Queremos convencerlos de que hay otras oportunidades en la vida.” Señaló.
Así es como Decenas de adolescentes de riesgo pertenecientes a las barras bravas y pandillas juveniles del Rímac, están recibiendo cada semana clases de baile de la Capoeira. Son alrededor de 20 jóvenes pertenecientes a las barras bravas de Sporting Cristal y pandillas nocturnas, que asisten cada lunes a recibir enseñanzas de flexibilidad, dominio de equilibrio y agilidad. Las clases se imparten cada lunes de 8 a 10 de la noche, a cargo de profesores especialistas, nutricionistas y sicólogas.
DATO:
Juventudes:
Es un programa de la municipalidad del Rímac en favor de los jóvenes, uno de los programas más efectivos a nivel municipal que ayudan a la reinserción de decenas de jóvenes. Antonio Cocha, jefe del área, afirma que la captación se hace a través del deporte, el baile y el cine que se ofrecen gratuitamente en el distrito.
"La barra no es el problema, porque ahí los chicos expresan su amor por el deporte, lo malo es la violencia que surge en los enfrentamientos entre barrios o equipos, y eso es lo que se destaca y se muestra con imágenes o charlas a los muchachos del Rímac", agregó Cocha.
Según el funcionario, resulta más complicado convencer a las mujeres pandilleras de que entren al programa, porque usualmente su familia no sabe de su participación en las pandillas. Sin embargo, acá se guarda total discreción y se les ayuda de esa manera.
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